La huella cluniacense
Desde su creación, en 1994, los fundadores de la Federación supieron que era primordial definir rápidamente una imagen de los sitios cluniacenses, que contribuyera más tarde a darle notoriedad.
De esta manera el nombre, el rosetón de los sitios cluniacenses y las actividades de la Federación fueron registrados a finales de 1994 en el Instituto nacional de la propiedad industrial. De hecho, solos los sitios miembros de la Federación pueden presumir de su imagen y utilizarla en su comunicación.